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'Me he puesto la meta de pasar de ayudante de cocina a cocinero. Y en eso estamos'

03/2015

Elías es un joven de 20 años que, tras llegar de Guayaquil (Ecuador) se ha formando como ayudante de cocina en el Centro El Carmel de Fundación Adsis.


Elías, ¿qué te ha aportado formarte en Fundación Adsis?


Además de estudiar cocina, lo que más me ha gustado de la formación en la Fundación han sido las “transversales”, aprender a conocer nuestras aptitudes y habilidades, para potenciar las que tenemos y mejorar las que tenemos menos desarrolladas.


¿Y a ti que actitud te ha tocado reforzar?


Sobre todo, la del autocontrol. Me pasaba que si me llamaban la atención o me daban órdenes me costaba autocontrolarme y me enfadaba. En una cocina el autocontrol es muy importante, porque hay momentos de estrés en los que tienes que estar muy sereno y receptivo.


¿Y ahora cómo reaccionas ante las indicaciones de un jefe de cocina?


He aprendido estar mucho más tranquilo, a escuchar, a entender que si me riñen es por el bien del trabajo. En las prácticas, por ejemplo, me riñeron porque había hecho un plato mal. Reaccioné quedándome quieto, escuchando y aceptando que tenía que hacer el plato otra vez, y ya está. A la segunda, me salió mucho mejor.


¿Y por qué elegiste cocina?


Pues la verdad es que al principio no veía muy claro esto de cocinar para los demás; me daba miedo cortarme con las prisas, que la comida me saliera mal, etc. Pero a medida que fui yendo a clase y aprendiendo vi que no se me daba mal. Cuando llegó el momento de hacer prácticas en una empresa estaba muy nervioso, pero ahora me he dado cuenta que estoy aquí para aprender, para preguntar y mejorar. Me he puesto la meta de pasar de ayudante de cocina a cocinero. Y en eso estamos.


¿Y en qué eres bueno tú en la cocina?


No puedo decir que sea bueno en nada en concreto, pero de lo que sí me he dado cuenta es de que aprendo rápido. De momento no soy mucho de desenvolverme en la cocina, pero si me explican lo que tengo que hacer, lo aprendo rápido.


¿Y crees que tu paso por Adsis te ha ayudado en alguno de esos temas?


Cuando llegué aquí era un poco problemático y pasaba bastante de todo. Recuerdo que Cori, mi educadora, un día me dejó muy claro que si estaba aquí era para aprender y para tomarme las cosas en serio, que si no, ya sabía donde tenía la puerta. Aunque ahora creo que no lo decía en serio, en ese momento me gustó que me dejara las cosas claras y que me hablara con claridad. A partir de ese momento decidí que tenía que adaptarme, que si no, no haría nada con mi vida.


¿Es muy diferente el trato que has encontrado en Adsis que el que te han ofrecido otros educadores o profesores?


Pues la verdad es que aquí los educadores, y sobre todo Cori, que ha sido la mía, se implican muchísimo, están muy encima de ti pero no obligándote a hacer nada, si no haciendo que tú tomes tus propias decisiones y cargues con sus consecuencias. En otros sitios me he encontrado que tenía que hacer las cosas “porque sí”, y creo que cuando te imponen algo es muy difícil que lo hagas de buena gana.


Y ahora, ¿cómo ves el futuro?


Pues me gustaría poder trabajar en una cocina, por ejemplo la del grupo Sagardi, y así seguir formándome para llegar a ser cocinero.


Si lo tienes tan claro, seguro lo consigues.


¡Eso espero!