Entrevista a Etienne Cartuyvels de Tradhoc
10/2019 - Valladolid
Etienne es el director de Tradhoc, empresa de Valladolid dedicada a la traducción que colabora con Fundación Adsis. Además de la aportación económica, Etienne también apoya el trabajo de la fundación como voluntario, acompañando a un menor a través del programa Enlace.
El Servicio de Transición a la Vida Adulta que Fundación Adsis lleva a cabo en Valladolid ofrece apoyo y una vivienda a jóvenes de entre 18 y 21 años que no cuentan con respaldo familiar y que, tras cumplir la mayoría de edad, dejan de estar tutelad@s. Se encuentran de un día para otro sin hogar y sin ningún tipo de apoyo. A través de este proyecto, Fundación Adsis les acompaña y les brinda el soporte educativo, laboral y emocional que les va a facilitar su inserción socio-laboral.
Una empresa vallisoletana dedicada a la traducción, Tradhoc, apoya este proyecto destinando el 4% de su facturación para que l@s jóvenes que participan en el mismo logren vivir de manera autónoma.
Hemos hablado con su director, Etienne Cartuyvels, que lleva 25 años dedicado a la traducción y que además de apoyar el proyecto a través de su empresa, también lo hace como voluntario de la fundación acompañando a un menor tutelado.
Tradhoc es una empresa que se dedica a la traducción e interpretación en cinco lenguas. ¿Cuál es vuestro elemento diferenciador?
Anteponemos la calidad a la cantidad. Todas las personas de nuestra plantilla traducen solo hacia su idioma nativo y están especializadas en materias concretas. Ofrecemos un servicio de traducción integral: por ejemplo, cuando traducimos una web o un catálogo de productos, realizamos gratuitamente la revisión de estos cuando estén ya montados. Por último, siempre avisamos al cliente de los fallos, incoherencias o contradicciones que pueda contener cualquier documento. Me atrevo a decir que esta lectura crítica del traductor permite muchas veces al cliente mejorar su texto original.
Desde hace unos meses la empresa que diriges, Tradhoc, colabora con la fundación, muy vinculada al centro de Valladolid. ¿Cómo nos conociste?
En noviembre 2017 recibí de una compañera de mi grupo de networking de la CVE (Confederación Vallisoletana de Empresarios) un artículo de la Fundación Adsis Valladolid en el que buscaban “donantes de tiempo para ayudar a cambiar una vida” para su programa Enlace (acompañamiento de menores). Me impactó el artículo y fue lo que me hizo contactar con la fundación.
¿Y qué fue lo que te animó a colaborar?
Fuimos, mi mujer y yo, a hablar con Aurora Corona, la directora de la fundación, y nos gustó el proyecto Enlace porque nos resultó muy sólido y bien estructurado. Nos ofrecimos como personas voluntarias, empezamos las sesiones de formación y, al cabo de tres meses, iniciamos cada uno el acompañamiento de un menor. Unos meses más tarde me ofrecí a la fundación para buscar el apoyo económico de empresas vallisoletanas.
Decidiste aportar una parte de tu facturación al Servicio de Transición a la Vida Adulta. ¿Por qué a este y no a cualquier otro proyecto?
Bueno, creo que este proyecto es fundamental para apoyar a jóvenes que salen del sistema de protección cuando cumplen 18 años ya que no tienen ninguna red familiar o social que les apoye. Este servicio les ayuda a adquirir habilidades sociales, buscar empleo y llevar una vida autónoma, tres condiciones indispensables para que puedan salir de la situación de exclusión en la que se encuentran. Por otra parte, me parece que es la continuación lógica del acompañamiento del menor que estoy haciendo.
Además de colaborar como empresa, también eres voluntario… Cuéntanos, ¿qué voluntariado llevas a cabo?
Acompaño a un menor tutelado de 15 años… es decir que quedamos un par de horas a la semana para dar un paseo, hacer compras o tomar algo. No siempre es fácil ya que provenimos de entornos muy diferentes, pero vamos construyendo poco a poco una relación afectiva estable. Creo que esto es lo que más echan en falta estos jóvenes, ya que su entorno familiar no ha podido darles esta base afectiva.
Seguro que haciendo voluntariado aprendes tú también…
Sí, sobre todo a descubrir una realidad diferente e invisible, pero que está al lado de tu casa. Escuchar y no juzgar; dar de tu tiempo, que es más difícil que dar dinero, pero mucho más gratificante. Conocer a gente (personas de la fundación, voluntarias, educadores de centros) que luchan cada día para ayudar a jóvenes vulnerables a salir adelante.
¿Qué importancia le das a este tipo de colaboración entre entidades y empresas? ¿Animarías a otras empresas a colaborar con Fundación Adsis? ¿Por qué?
Desde luego que las animaría. A Tradhoc nos permite desmarcarnos de la competencia. Cada vez que tenemos un nuevo cliente, le mandamos el folleto de nuestro convenio y le explicamos que está colaborando indirectamente con Fundación Adsis. La acogida de esta colaboración suele ser muy buena por el cliente e incluso puede abrir la puerta a otras colaboraciones con la fundación. Pongo un ejemplo: hace unos meses hicimos un trabajo de interpretación con una empresa en Valladolid. Al día siguiente les explicamos el proyecto y nos remitieron a su departamento de RSC… ¡Y ahora están hablando de un acuerdo de colaboración a nivel nacional con la Fundación Adsis!
Creo que este tipo de colaboración ONG-empresa ofrece ventajas para ambas partes: para Fundación Adsis, está claro que le permite dar visibilidad a un proyecto que desarrolla con un colectivo muy vulnerable y prácticamente invisible. Y para la empresa, esta colaboración puede servir para mostrar su sensibilidad social de cara a la sociedad y para fomentar la implicación de su personal en una buena causa. Además, la fundación está abierta a cualquier idea o propuesta de colaboración… desde el patrocinio de eventos hasta la oferta de empleos, cursos de formación, una entrevista en la radio, etc. Si le echamos un poco de imaginación, vemos que las posibilidades de colaboración son infinitas.